martes, 29 de marzo de 2011

DESCRIPCIÓN EN LA NARRACIÓN

La descripción :
  • es un tipo de texto o variedad del discurso mediante la que se atribuyen a los objetos determinadas cualidades o propiedades
  • es una forma de recrear la realidad formando una imagen que sea semejante a la que se percibe por los sentidos. 
  • muestra con las palabras una realidad concreta o abstracta a la vez que informa  sobre cómo son los lugares, objetos, ambientes personas, procesos, emociones o conceptos
  • explica, de forma detallada y ordenada, cómo son las personas, los lugares o los objetos.

TIPOS DE DESCRIPCIÓN

A.) TOPOGRAFICA: DESCRIPCIÓN DE LUGARES



prosopografía: Es la descripción de los rasgos físicos de la persona, de su apariencia externa.
Lo más importante es observar atentamente a la persona y seleccionar y anotar los rasgos físicos que la caracterizan. Los rasgos más importantes son los que se refieren al rostro, al aspecto general y al vestido.
Antes de hacer la prosopografía hay que tener en cuenta estas normas:
  • Es necesario seguir un orden al ir "pintando" al personaje. Se debe comenzar por el aspecto general y después dar detalles concretos.
  • Se debe presentar al personaje en acción para que cobre vida, describiendo sus movimientos.
  • Es conveniente reflejar nuestros sentimientos hacia el personaje (ternura, admiración, aversión...).
  • Hay que elegir el tono de la descripción: un tono serio, irónico, burlón.




Retrato: Es una descripción combinada en la que se describen las características físicas y morales de la personacuando describimos a una persona, no sólo nos referimos a su físico, sino que intentamos reflejar su forma de ser y de actuar, y también lo que nosotros pensamos de esa persona. Describir a una persona reflejando sus sentimientos, sus costumbres y todo lo que forma su personalidad es un retrato de carácter.
Para hacer un buen retrato y que éste sea completo hay que tener en cuenta:
  • Observar y seleccionar los rasgos más destacados de la persona, tanto físicos como de carácter.
  • No acumular demasiados rasgos, sólo los más característicos.
  • Describir los rasgos en orden. Primero los físicos y después las cualidades, la forma de actuar, etc.
  • Presentar al personaje en una ambiente, para que cobre vida y sea más creíble.
  • Elegir bien las palabras y utilizar recursos expresivos para dar viveza y fuerza a la descripción.





lunes, 28 de marzo de 2011

CUENTO INFANTIL

 

CUENTO INFANTIL EL PEQUEÑO COLIBRÍ

El pequeño colibrí azul se sentía triste y cansado. Se perdió cuando viajaba con su familia en busca de un lugar más cálido donde pasar el invierno, y cuando entró la noche, después de mucho tiempo buscándolos sin ninguna suerte, se resguardó en una pequeña cueva que encontró en la montaña. Dentro sólo había unas cuantas ramas y hojas secas llevadas por el viento. Aunque alimentarse no era algo que a él le preocupara, ya que siempre había sido muy hábil para esta tarea, el no saber si volvería a ver a sus seres queridos le entristecía profundamente.
-No te alejes de nosotros cuando migramos a otro lugar-, le repetían siempre sus papás. Pero él se emocionaba con todas las cositas que descubría durante sus viajes, y se quedaba boquiabierto contemplando esas maravillas, batiendo sus pequeñas alitas encima de cada tesoro, mientras los demás seguían su camino sin percatarse de su falta. Aquel día mientras volaban vio un destello de luz, un reflejo que salía de entre los árboles y sin darse cuenta fue perdiendo altitud y acercándose para ver qué era aquella hermosa luz. Entonces descubrió un enorme y precioso lago de aguas cristalinas que le dejó totalmente sorprendido.


-¡¡¡Uauuu!!!- Exclamó, viéndose reflejado en el agua. -¡¡¡Que maravilla!!!!-
Él nunca había visto nada igual. El sol empezaba ponerse y sus rayos en el agua aparecían como brillantes reflejos dorados que casi cegaban, convirtiéndolo en un cuadro espectacular.
Allí correteó por encima del agua jugando con su reflejo, utilizando como espejo las quietas aguas donde contemplaba las blancas nubes deslizándose por el cielo. No se dio cuenta de que el tiempo pasaba y cuando de pronto alzó su vuelo llamando a su familia para enseñarles lo que había descubierto, vio que su llamada no era respondida, y que sus papás y sus hermanos habían seguido su vuelo, y donde estaban ahora ya no podían oírle.
De pronto un enorme temor se adueñó de él. De sus ojos desapareció toda esa belleza y sólo escuchaba ruidos extraños que cada vez aumentaban más su miedo y su malestar. Unos gritos de aves desconocidas resonaban por el bosque, y todo lo que antes parecía bello se convirtió en algo tétrico y fantasmal. El sol ya casi no alumbraba y temía quedarse solo en el bosque, así que salió volando en busca de su familia. Pero la noche entró y él seguía solo. Buscó entonces un lugar donde cobijarse y allí pasó la noche. Con las hojitas que había en la cueva se hizo una camita un tanto ruidosa, ya que las hojas estaban secas pero por lo menos le dieron un poquito de calor para esa noche. Al día siguiente cuando despertó no recordaba que se había perdido, pero pronto al levantarse recordó lo que había sucedido, y empezó a preocuparse.
-¡Oh, Dios mío! ¿Qué voy a hacer aquí solo? ¿Dónde está mi familia?- Y pronto descubrió cómo les echaba de menos.
Sus papás siempre le repetían que si algún día se perdía lo que tenía que hacer era no alejarse del último lugar por donde habían pasado todos juntos, ponerse en un lugar suficientemente alto como para que pudieran verle cuando volvieran a buscarle, y que nunca dejara que el miedo le impidiera ver la realidad.
-¡¡¡Es verdad!!!!- Dijo cuando recordó. -Mis papás me dijeron qué tenia que hacer si me perdía así que no tengo nada que temer, mi familia me está buscando y pronto nos reuniremos-.
Así que salió de su cuevecita despidiéndose de ella y dándole las gracias por haberle ofrecido cobijo esa noche. De nuevo todo volvía a ser hermoso, y la seguridad de que encontraría a su familia le hacia volar feliz y alegre por unos parajes totalmente desconocidos para él. Pronto encontró de nuevo el lago por donde volaron la última vez, y allí buscó el árbol más alto y se posó en una de sus ramas. Mientras esperaba, empezó a canturrear y poco a poco se fueron añadiendo a su canción todos los pajarillos que habitaban por esos entornos. Él les contó que se había perdido, y decidieron cantar muy muy fuerte para que todo el que pasara pudiera oírles. Pronto su canción se podía escuchar desde muy lejos, lo que ayudó a su familia a encontrarle más rápidamente.

Después de aquel día, nuestro pajarillo se había hecho más sabio. Ahora sabía que tenía que advertir siempre a su familia cuando se alejaba de ellos durante sus viajes. Sabía también que durante el camino de la vida encontraría a quienes le ofrecieran su ayuda, y lo más importante de todo, descubrió que cuando el miedo se apoderaba de él las cosas más hermosas podían parecer las más terribles.
 Rosa María Roé

viernes, 25 de marzo de 2011

ELEMENTOS NARRATIVOS

Los textos narrativos son aquellos donde un narrador cuenta unos hechos que le han ocurrido a él mismo como personaje o a otros en un tiempo y un espacio determinados. El género literario que los estudia se llama épica o narrativa. Los elementos que intervienen en una narración son los siguientes:

La historia que se cuenta en la narración o el conjunto de acontecimientos que viven los personajes en un marco espacio-temporal, y el discurso, la manera que adopta el narrador para ordenar esos acontecimientos. La historia de Lázaro es su vida al sevicio de varios amos hasta que se enmancipa y se casa, mientras que el discurso es la técnica autobiográfica que adopta el narrador para ordenar, en siete tratados y bajo la forma de una extensa carta dirigida a un receptor desconocido, los avatares vividos con sus amos.

La estructura es la disposición del material narrativo. Conviene distinguir la estructura externa de la interna. La externa es la distribución formal en que se presenta la narración (capítulos, secuencias, tratados, cartas, diarios...) y la interna, el modo en que se ha ordenado el material narrativo, que puede ser: lineal, cuando la acción sigue el orden normal de introducción o planteamiento, nudo o desarrollo y conclusión o desenlace. Cervantes adopta esta estructura en El Quijote; "in media res", cuando el relato empieza ya avanzada la acción y luego o bien sigue adelante o bien retrocede a partir de ese momento. La novela policiaca suele adoprar este tipo de estructura; retrospectiva, cuando los hechos se narran al final de haber sucedido y se vuelve atrás en el tiempo para contarlos. Un ejemplo lo vemos en El camino de Delibes, en que Daniel el Mochuelo, antes de partir para la ciudad, recuerda todo lo vivido en el pueblo.

El narrador cuenta la historia del relato. En función del punto de vista que adopta éste ante los hechos y la persona gramatical en que los cuenta, existen los siguientes tipos de narrador: el narrador protagonista, que en primera persona cuenta los hechos (éstos deben ser ficticios) como si le hubieran sucedido a él. Un ejemplo lo podemos encontrar en el Lazarillo. El autor narrador-protagonista, que también en primera persona cuenta sus propias vivencias; es el caso de los libros de Memorias y Autobiografías (La Rosa, de Camino José Cela, o La arboleda perdida, de Rafael Alberti). El narrador testigo, representado por un personaje secundario que cuenta los hechos en los que ha intervenido directa o indirectamente. Un ejemplo lo hallamos en el doctor Watson, ayudante de Sherlock Holmes, en las novelas de Conan Doyle. Estos tres tipos de narradores pertenecen a su vez al llamado punto de vista interno, cuya principal característica es el empleo de la primera persona gramatical (el yo o el nosotros). Al punto de vista externo, que se da cuando el narrador está fuera de los hechos contados y utiliza la tercera persona, pertenecen las siguientes clases de narradores: el narrador omnisciente, que conoce a la perfección lo que hacen, piensan y sienten todos los personajes (incluso en ocasiones inteviene para opinar sobre los hechos ocurridos o sobre el modo de ser de los personajes; es el caso de Pío Baroja en muchas de sus novelas (Las inquietudes de Shanti Andía). Cuando sólo conoce lo que hace y piensa alguno de los personajes y da a conocer las cosas a través de la visión de éste, el narrador pasa a ser omnisciente limitado; un ejemplo claro lo vemos en La Regenta, de Leopoldo Alas "Clarín". El narrador observador, especie de mero testigo que se limita a recoger en la narración los hechos tal como suceden sin añadir ni quitar nada, como si fuera una cámara de vídeo, y lo mismo actúa con los personajes, que sólo son conocidos en el relato por lo que ellos hacen y dicen o por lo que otros personajes nos cuentan de ellos; es el caso de El Jarama, de Sánchez Ferlosio. Finalmente el narrador puede emplear la segunda persona para dirigirse a un tú o a un usted que puede no estar presente; uno de los ejemplos más claros es el que presenta Delibes en su novela Cinco horas con Mario.

Los personajes, seres inventados que actúan en la narración y que son definidos por una serie de caracteres físicos y morales a lo largo del relato. Según esta caracterización, se clasifican en planos (si sólo los define un rasgo de carácter o su comportamiento es invariable: el malo y el bueno, por ejemplo, de las novelas policiacas) y redondos (si poseen varios matices de personalidad y se parecen mucho a los seres reales, es decir, varian su carácter y su modo de pensar según las circunstancias: el protagonista de las novelas picarescas). Atendiendo a la visión del autor, también se pueden clasificar en personajes realistas (semejan a las personas vivas), fantásticos (son completamente imaginarios o inventados), históricos (si encarnan a un personaje que ha existido) o simbólicos (si representan alguna idea en especial). Finalmente, los personajes pueden ser, atendiendo a la función que ejercen en el relato, principales (llevan el peso de la trama y están más caracterizados que otros), secundarios (tienen menos importancia que los anteriores, pero contribuyen también a que se desarrolle la acción), protagonistas (centra la atención del relato; es el héroe en determinado tipo de narración: por ejemplo, Amadís en la novela de caballería del mismo nombre; o el antihéroe en otros: por ejemplo, Lázaro de Tormes en la novela picaresca que lleva su nombre), antagonistas (se oponen a los anteriores y contribuyen a que la acción se complique y adquiera más interés).

El tiempo es el transcurso en el que se desarrolla la acción y el tratamiento que recibe. Puede ser: cronológico o lineal (si la acción sucede de principio a fin; la mayoría respeta este tipo), histórico (si la acción se sitúa en una etapa concreta de la Historia; las novelas históricas del Romanticismo toman la Edad Media como marco temporal), restrospectivo (si regresa al pasado desde un punto de la acción concreto; es el caso de las novelas policiacas), anticipativo (si se adelantan acontecimientos que sucederán más tarde; un ejemplo claro es el de Crónica d euna muerte anunciada, de G. García Márquez).

El espacio es el lugar en el que se desarrolla la acción y el tratamiento que recibe. Puede ser: realista u objetivo ( si se parece al espacio de la realidad ; el de las novelas realistas del siglo XIX son un buen ejemplo), subjetivo (si refleja la visión personal de un determinado personaje; las leyendas de Bécquer reúnen claras muestras), fantásticos (si son ambientes inventados por el autor; Tolkien en El señor de los anillos  nos ofrece ejemplos incuestionables).

Género Narrativo

El genero narrativo es una expresión literaria que se caracteriza porque se relatan historias imaginarias o ficticias (sucesos o acontecimientos) que constituyen una historia ajena a los sentimientos del autor. Aunque sea imaginaria, la historia literaria toma sus modelos del mundo real. Esta relación entre imaginación y experiencia, entre fantasía y vida es lo que le da un valor especial a la lectura en la formación espiritual de la persona.
De acuerdo



De acuerdo a la realidad que presentan se dividen en:
w Costumbristas: relatan la vida cotidiana de un grupo de personas dentro de su contexto social. Las situaciones que se presentan pueden encontrarse en la realidad.
w Realistas: relatan situaciones reconocibles en la vida real. Los personajes, lugares y situaciones pueden no ser verdaderos pero podrían existir en la realidad.
w Humorísticas: se caracteriza por su comicidad. En él se utilizan diferentes recursos: chistes, personajes y situaciones graciosos o ridículas, etc.
w Históricas: relatan situaciones realmente transcurridas en el pasado. Los personajes y lugares han existido en la realidad.
w Biográficas: relatan la vida de una persona. Cuando el autor es el protagonista se denomina autobiografía.
w Fantásticas: relatan hechos increíbles, personajes irreales o lugares extraños y desconocidos. Muchas veces dentro de estos cuentos aparecen relacionados con hechos realistas.
w De ciencia ficción: relatan hechos fantásticos relacionados con el avance científico. Generalmente participan robots y seres de otros planetas en lugares distantes en el futuro.
w Maravillosas: relatan hechos cuyos protagonistas y acciones están totalmente fuera de la realidad, como los cuentos de hadas, magos y brujos.
w Fábulas: son narraciones que terminan con una enseñanza o lección llamada moraleja. Muchas veces los personajes son animales o cosas que realizan acciones propias de los seres humanos. Ese recurso de denomina personificación.
w Leyendas: son antiguas narraciones que fueron transmitidas de padres a hijos en forma oral. Transita un camino intermedio entre la fantasía y la realidad. Suelen explicar el origen de plantas, animales y lugares mezclando el conocimiento adquirido durante generaciones con creencias religiosas y supersticiones.